Instrucciones para afrontar encuentros con exnovias (Por Dr. Di Bolazzo)

   Tarde o temprano el momento llega: hay que reunirse con una exnovia para resolver algunas cuestiones pendientes, tales como negocios y deudas en común, devolución de objetos y -en el peor de los casos- dudas de alguna de las partes relativas a aspectos sentimentales. El encuentro fácilmente puede tornarse agresivo y extenderse mucho más de lo planeado, de modo que arruine el día, noche y/o fin de semana. Por tanto, hay que asistir preparado con un conjunto de defensas psicológicas y materiales, las cuales revisaremos a continuación.
a) Exnovios, exsocios: cómo lograr vender nuestra parte. Si usted posee algún emprendimiento económico en común con su ex, es obvio que las cosas no irán del todo bien luego de la ruptura. Supongamos que han instalado juntos un puesto de panchos en la calle. Si ella es la despechada, lo más probable es que termine involucrándose sexualmente con el panchero a modo de venganza, por lo que el panchero a su vez se aprovechará de la situación y empezará a quedarse con las ganancias y el capital. Escenas de alto voltaje erótico podrán verse en su puesto de panchos, verdaderas porquerías entre el vendedor y su exnovia socia, que alejarán a cualquier cliente potencial. Por todo esto, es necesario que usted asista al encuentro con la firme convicción de vender su parte de la sociedad, algo que desde luego su expareja no aceptará, pues solo está interesada en ocasionar más problemas. La solución a esto es ir acompañado de algún sujeto siniestro reclutado en el Barrio Chino, de aspecto parecido a Luca Brasi, decirle a ella que se trata de nuestro abogado y que él se encargará de las negociaciones. Nuestro acompañante no sabe nada de leyes pero sí mucho de extorsión, por lo que en pocos minutos obtendremos el efectivo y/o cheque correspondiente a nuestra parte del negocio, posiblemente firmado con sangre.

No crea que podrá continuar con la sociedad panchera después de la ruptura amorosa. Debe lograr que ella compre la parte o perderá todo

b) Pertenencias: cómo obtener su devolución. Al terminar una relación quedan numerosos objetos propios en el domicilio de la expareja, tales como: remeras, mascotas, comida, secadores de pelo, paletas de pádel, automotores, joyas y zungas. Todo esto será muy difícil de recuperar. El encuentro puede tornarse una engorrosa y dramática negociación acerca del carácter y forma de las devoluciones. Usted tiene mayor cantidad de objetos valiosos en casa de ella que los que tiene ella en casa de usted. Por tanto, deberá equilibrar la cuestión a los fines de que ella no se aproveche de tal estado de cosas. Horas antes de la cita secuestre a su mejor amiga y manténgala atrapada en el sótano de algún aguantadero de los suburbios. Cuando su ex comience a dar vueltas para devolverle sus pertenencias, simplemente ponga al teléfono a la prisionera. Su exnovia no tendrá más remedio que devolverle todo, pues el duelo por la ruptura le sería imposible sin su mejor amiga, con quien descarga el rencor hacia usted dieciocho horas diarias.

Secuestre a su mejor amiga y úsela como factor en las negociaciones por la devolución de objetos.

c) El conjunto final de reproches. Las cuestiones materiales pueden no ser las más problemáticas. Al fin y al cabo, lo más importante es la salud. Y es su salud mental lo que precisamente su exnovia tiene como objetivo dañar. Lo atacará con reproches que abarcarán un período comprendido entre el preciso instante en que se sentaron en el bar ("Siempre tenés que elegir la mesa vos, siempre el mismo autoritario de mierrrda") y la quinta vida anterior a la presente, (Ella cree en la reencarnación y le lanzará un "Ya me cagaste la existencia cuando éramos campesinos en la Rusia medieval, contagiándome una venérea por cogerte a las ovejas"). Con gran facilidad ella mezclará todos los aspectos de la relación, de la personalidad de usted, de la transmigración de las almas, del universo, del cielo y del infierno y siempre el culpable será usted. Con este nivel de agresión no es poco probable que usted termine apuñalado o cagado a tiros. La solución a esto es muy simple: proponerle reanudar el noviazgo. Previamente usted habrá resuelto lo mencionado en los puntos a) y b). Ella aceptará y terminará con los reproches. Estará feliz de haber logrado recomponer la relación. Sin embargo, lo que usted hará será conducirla a su casa y no volver a aparecer nunca jamás. Cambie su domicilio, sus números de teléfono y su lugar de trabajo. Hágase una pequeña cirugía estética y consiga documentos falsos que presentará si, a pesar de todo, ella logra encontrarlo.

Usted antes y después de una cirugía estética. Propóngale reanudar la relación pero desaparezca para siempre pocos minutos después.