Tres chongos que no pueden faltar en tu agenda (Por Lic. Grace Falopio)

   ¡Pará! No seas tan puta, ¿querés? No podés andar corneando a tu marido con cuanto vago anda dando volteretas por el barrio. No es una cuestión moral sino de placer. No desperdicies más histeriqueos en polvos mediocres. Acá están, niña, los tres mejores tipejos con los que podés traicionar y humillar al impotente inútil que tenés en tu casa.
1) El stripper comunista. Experimentá la gélida aventura de putanear en Siberia. Allí, aunque no se difunda, aun hay pueblos en los que el sistema de gobierno es comunista. Encontrarás rusos desnudistas de dos metros de alto por uno y medio de ancho con músculos hipertróficos y aceitados. Logran y mantienen erecciones con 40 grados bajo cero, empalando nieve con la poronga en dirección al Estrecho de Bering. Si soportan semejantes temperaturas, mucho más aguantarán tu inveterada frialdad. Además con tanto frio se neutralizan las colonias de gérmenes que albergás en tus partes íntimas por no bañarte nunca. Experiencia personal: hice este trip en 1982 junto a una psicopedagoga amiga y nos garchamos hasta a un San Bernardo, previo habernos tomado el barrilito de vodka íntegro mezclado con dos Alplax® per cápita.

Un trosko como este es una de las mejores opciones para denigrar a tu esposo.

2) El escritor fracasado. Alguna vez estuvo convencido de que iba a ser el Cortázar de los '90 pero terminó estudiando para contador en una universidad privada pagada por los papis. Su cuento más exitoso obtuvo el Premio Revelación de la Municipalidad de Chuña Huasi, gracias al secuestro extorsivo de dos de los tres jurados. Con la llegada de internet pudo expresar su arte en un blog de mierda como este que estás leyendo. Su autoestima cae minuto a minuto porque en el fondo sabe que nunca será descubierto por Adrián Suar para escribir el guión "Garcholeros" y, por lo tanto, nunca tendrá su ansiada fama. La consecuencia de todo esto es una personalidad sexopática y morbosa que busca elevar el ego mediante la satisfacción absoluta de su amante de turno. Sacale hasta la última gota de semen y después mandalo a narrar vuestra historia prohibida vía Twitter. Experiencia personal: me levanté al hermano de Alberto Migré en la primavera alfonsinista. Aunque tenía que aguantar su patológica envidia hacia el guionista, el resto del tiempo me entripaba a ritmo frenético y escandaloso.

El impulsor de este blog es un buen ejemplo de escritor inservible que te destruye en el dormitorio. Mandale un mail.

3) El reaccionario malhumorado. Un insufrible burgués que hizo todo lo que la cultura consumista le ordenó desde que cumplió los dos años. Estudió, trabajó y estudió, sigue trabajando todo el día, y es un pilar de la sociedad capitalista y demoliberal. Pone el grito en el cielo cuando oye delirios referidos al anarquismo y la revolución. La represión de todos sus deseos infantiles tiene como contrapartida una dinámica psicotrónica que lo sumerge en una insaciabilidad oral de la puta madre, por lo cual te hace un cunnilingus cada 15 minutos durante las tres horas de telo. Experiencia personal: seduje a un cuellito blanco de TELECOM en el menemato y terminé con fono gratis y succiones al por mayor en el verano del '91.

Un yuppie ochentoso: no hay mejor que él en el sexo oral. Dale gas.